Hablamos de organizaciones saludables cuando nos referimos a aquellas que invierten en mejorar la salud, el bienestar y la productividad de los empleados mediante diferentes estrategias centradas en desarrollar un ambiente organizacional positivo, generando puestos de trabajo bien diseñados y ofreciendo a los profesionales oportunidades de desarrollo en su carrera profesional y en su entorno personal, consiguiendo resultados positivos en cuanto a la salud física y el bienestar de los trabajadores, mayor seguridad y menor riesgo de accidentes y enfermedades profesionales, mayor implicación de los mismos con la organización, mejora del ambiente laboral y de la imagen de la organización que además, puede ver como su productividad y competitividad aumenta.
Las organizaciones toxicas en cambio son aquellas que sufren de ambientes poco saludables y en ocasiones altamente nocivos para el trabajador, se trata de compañías en las que la gestión o la falta de gestión en Recursos Humanos provoca efectos nocivos en las personas que allí trabajan. Para poder identificar cómo son las organizaciones tóxicas nos centraremos en el trabajo de Peter J Frost, autor del Manual “Emociones Toxicas en el Trabajo” en el que el autor se refiere a un medio de trabajo tóxico como aquel en el que las prácticas de la organización y las actitudes y acciones del equipo directivo son emocionalmente insensibles. Las características fundamentales que nos señala Frost son:
- Fallos en la Comunicación que se describe como pobre u obstaculizada y que afectará a los trabajadores tanto a nivel individual como grupal y organizacional
- Relaciones interpersonales frías o conflictivas
- Fallos en el diseño de puestos de trabajo, conflicto y ambigüedad de rl
- Falta de información, ausencia de feedback o información sobre el propio rendimiento o inadecuación del mismo
- Falta de identificación con la organización
Puede añadirse una característica que no se recoge en la clasificación de Frost que es el elevado grado de estrés al que están sometidos los trabajadores.
Las investigaciones que se han realizado en materia de psicología Organizacional Positiva, nos demuestran que trabajar en la Gestión de Recursos Humanos (diseño de puesto, especificación de objetivos realistas, información y comunicación asertiva, medidas en responsabilidad social) e invertir en la formación y capacitación de directivos (liderazgo, inteligencia emocional, comunicación eficaz, motivación de equipos) hacen que la empresa se dirija hacia la mejora de la productividad y competitividad a través de la mejora del bienestar y la calidad de vida de sus equipos.
Cada vez son más las empresas que están acercándose a estos modelos nuevos de Gestión de Recursos Humanos, descubriendo lo eficaz que resulta implementar estos sistemas de gestión para mejorar los resultados organizacionales.