Es la traducción de algo así como mente centrada, atención plena o conciencia plena. Puede ser como aprender a centrarnos en el presente, sin poner etiquetas o presuponer o esperar algo… recibiendo el presente tal y como es.
Conocemos mindfulness en los años 70 dentro del mundo de la psicología y la psiquiatría a partir del estudio de técnicas de meditación budista, sin embargo se utiliza con mucho éxito en tratamiento del estrés, del dolor, de la ansiedad, de trastornos alimenticios y adicciones.
Nuestra experiencia con esta herramienta es que en los procesos de Coaching en organizaciones como en las sesiones individuales, aplicar Mindfulness acelera el proceso de toma de consciencia y facilita la concentración y la conexión con el objetivo, consiguiendo una mayor motivación y profundizar en el autoconocimiento.
Utilizamos Mindfulness con nuestros clientes para mejorar la concentración y la atención, para mantener un estado conectado con uno mismo. Los estudios demuestran actividad en la zona medial de la corteza prefrontal, es la zona en la que conectamos con nuestro cuerpo y con nosotros mismo, que nos proporciona equilibrio, que nos permite pararnos y pensar antes de tomar acción, es la zona en la que conectamos con la intuición… Esto nos ayuda tanto en nuestra vida personal como profesional, nos permite estar mas con nosotros y por tanto con los demás.
El primer paso para la práctica consiste en la respiración, concentrar nuestra atención en nuestra respiración. En este sentido me gusta mucho resaltar el hecho de que no hay que esforzarse en cambiar la respiración ni obsesionarse si el pulmonar o abdominal. Solo concéntrate en respirar.
Es probable que nos distraigamos, lo importante es percibir que nos estamos distrayendo y volver a nuestra respiración.
Para que sea eficaz es necesario practicarlo cada día. Una práctica de 10 minutos diarios es necesaria para conseguir resultados, aunque es mejor ocupar 20 minutos diarios de practica de Mindfulness, lo bueno es que puedes hacerlo en cualquier momento, en cualquier lugar, en cualquier situación. Vamos a pensar en Mindfulness como en una forma de cuidar nuestro cerebro cada día, igual que hacemos con nuestro aseo o con nuestro cuerpo cada día. Los resultados serán visibles en 2 o 3 semanas.
Os invitamos a que desde hoy apliquéis Mindfulness para mejorar calidad de vida.
